Por: Vincent Morfín Calvo, Abogado del área de Asuntos Públicos de Early Institute.
Publicación original de Diario Contra Réplica
El pasado 30 de enero, nos enteramos de que 15 menores resultaron intoxicados en una escuela de Guanajuato por participar en un reto viral conocido como “Clonazepam Challenge”. Esto, a muy pocos días de que se diera a conocer que en la Ciudad de México, 8 menores se intoxicaron en una secundaria por participar en el mismo reto, que consiste en consumir el fármaco y declarar victorioso a quien se duerma al último.
Estos hechos se suman a otros retos virales peligrosos, como otro caso idéntico en una escuela de Veracruz en noviembre de 2022, o el caso de una menor que falleció en Argentina tras intentar superar el llamado “Blackout Challenge”, que consiste en ahorcarse con un cinturón hasta casi perder el conocimiento y quitárselo al último momento.
Pareciera entonces que la moneda de cambio en el nuevo orden del mundo digital, son los “me gusta”, los “corazones”, los “comentarios” y la falsa ilusión de “reconocimiento” que creemos tener por parte de las personas que nos siguen en nuestras redes sociales.
Los retos virales conviven con nosotros día con día en el mundo digital y a pesar de su constante presencia en nuestras vidas, sabemos poco acerca de ellos. Los retos virales son desafíos o pruebas que se popularizan en las redes sociales y suelen consistir en realizar una tarea difícil que debe ser superada, pero la persona que lo completa suele recibir mucha atención de sus amigos, seguidores e internautas.
El problema inicia cuando por buscar este reconocimiento o atención, comenzamos a exponernos a situaciones de peligro que pueden terminar en tragedia. El problema se agrava aún más cuando hablamos de niñas, niños, y sobre todo adolescentes, quienes, en muchas ocasiones por su falta de madurez combinada con un deseo inmenso de popularidad, ponen en riesgo su integridad física con tal de ganar el reconocimiento de los seguidores.
En Early Institute, nos preocupa profundamente el que menores se encuentren sobre expuestos a las redes sociales, sobre todo, con la proliferación de estos nuevos retos virales peligrosos, por lo que hacemos un llamado general para que entre todos podamos ayudar a prevenir más escenarios lamentables como los que estamos viviendo hoy en día.
De esta manera, entre padres, madres y cuidadores, directivos de plataformas digitales, tomadores de decisiones y servidores públicos, necesitamos establecer acuerdos comunes para que, desde nuestras diversas trincheras, llevemos a cabo tareas de prevención y hagamos lo necesario para poner un alto al esparcimiento de este tipo de retos que no pueden terminar más que con una fatalidad tarde o temprano.